Una vez me dijeron que un texto te deja de pertenecer en el momento en que lo rubricas con el punto final. A partir de ahi pasa a ser propiedad de quienes lo leen. Y cada uno tiene su propio texto. De ser cierto tengo que pedirte comprensión, algo de cariño, paciencia y buen humor cuando no pienses como yo...que será en muchas ocasiones.Espero que este blog sea un humilde homenaje a aquellas reuniones nocturnas de nuestros abuelos; leoneses que compartían vivencias y opiniones al calor de la lumbre.
Bienvenido a este lugar que ya es de los dos.

jueves, 10 de junio de 2010

EL MUNDO EN UN BALÓN

Comienza la madre de todas las batallas, el Mundial, y es un buen momento para dejar por aquí un puñado de reflexiones y vaticinios. Por empezar, hay que hablar del gran favorito, corazón aparte:
ESPAÑA: Es cierto que ganar competiciones como un Mundial o una Champions League depende de muchos factores y algunos son incontrolables. Depende de que no te trinque un árbitro con el ojo mal colocado, de que no te estallen las cenizas de un volcán antes del gran duelo, etc…muchos factores.
Por ejemplo, la Eurocopa ganada fue, sobre todo, por tener un equipazo con una idea clara. Pero todo lo demás fue perfecto: ambiente, jugadores en buena forma, suerte, evitar lesiones. Muchos aspectos.
Esta España parece destinada a lo más grande, tocada por una varita divina. Y para ello, sólo hace falta ver como se mueven Silva, Iniesta, Fábregas, Villa, Alonso o Busquets al ritmo que marca el aún infravalorado Xavi Hernández. Un futbolista que es el faro de la mejor generación futbolística de españoles. Es una delicia verles jugar. Lo fue en la Eurocopa de la que salimos victoriosos y esta España parece mejorada por varios aspectos. Primero por la falta de estridencias y polémicas en el banquillo desde que se fue Aragonés. Por otro lado, la llegada de los barcelonistas Piqué y Busquets ha otorgado un plus de excelencia al once titular.
Sin embargo, dentro de la perfección y de todos los elogios que se pueden y deben hacer a esta España hay dos asuntos que invitan al pesimismo:
Por un lado los cruces. Va a ser complicado pasar de jugar contra cenicientas como Honduras o Costa Rica a hacerlo contra potencias como Portugal y Brasil de seguido y sin margen para el error. Los cruces van a ser infernales desde el primer momento.
Por otro lado veo que hay jugadores capitales para el engranaje español que no llegan en su mejor forma. Por empezar atrás, Casillas no pasa por su mejor momento y a día de hoy no es el portero más en forma de España. La línea defensiva ofrece todas las garantías. Es en la parcela ancha donde habitan más dudas: Iniesta llega muy tocado, a Cesc le faltarán minutos, Xavi tengo la sensación de verle agotado y Silva ha hecho su campaña más irregular. Tampoco Xabi Alonso llega, ni de lejos, a las prestaciones del mejor Senna. Es, sin embargo, en el banquillo donde están los futbolistas más en forma: Navas y Pedro; pero con ellos el equipo pasa de ser una orquesta por la medular a una estampida de forajidos en las bandas. En la punta de ataque más de lo mismo, Villa acabó el año fundido y con Torres pasa parecido al asunto Iniesta. El recambio Llorente condiciona demasiado el juego
ARGENTINA: La teoría universal del caos dirigida por un dios convertido en demiurgo. El equipo es un despropósito ideado por un pésimo entrenador pero estos tíos se convierten en fieras cuando se enfundan la albiceleste. Además, debería ser pecado descartar a un equipo que tiene a Messi en el mejor momento de su vida y estrellas como Diego Milito o el Kun Agüero.
FRANCIA: Sucede algo similar a Argentina, lo peor lo tiene en el banquillo. Además sus esperanzas siguen pasando por Henry que es como si Raúl aún comandase la galera ibérica. Tiene mala pinta el asunto pero Francia siempre responde en las grandes citas. Con todo, esta parece la ocasión en la que pegarán un sonado petardazo antes de que Laurent Blanc se ponga manos a la obra con la renovación bleu.
BRASIL: El gran rival según todas las quinielas y a mí, sin embargo, me parece que no es para tanto. Lo mejor que ha conseguido Dunga es armar un equipo sobre una potente defensa. En ataque se han encomendado a un Robinho muy venido a menos y a Kaká, quien pasa por el peor momento de su carrera.
ALEMANIA: Me encanta Alemania, esta Alemania más aún. Esta generación tiene un Mundial en sus píes, pero quizá no sea este. Además Joachim Low me parece una de las grandes apariciones en los banquillos europeos. Son talentosos, fuertes y recuperan la mejor tradición de peloteros teutones.
PORTUGAL: Lo que diga Cristiano. El madridista sabe que para llegar al Olimpo que tiene reservado en clara competencia con Messi debe hacerse con un gran título por selecciones. El resto del equipo llega muy fuerte atrás y con muchos problemas en ataque. Además, Queiroz nunca ha dado el nivel como primer entrenador.
ITALIA: Lo de siempre con los de siempre: catenaccio y suerte. Ya no tienen esa referencia en ataque como lo fueron Baggio, Totti y Luca Toni. Aún así siempre son temibles y más a un partido eliminatorio. Puede ser el canto de cisne de una gran generación de futbolistas que abandonará en Sudáfrica los terrenos de juego internacionales.
HOLANDA: Debe estar en la terna de candidatos a pesar de sus problemas para rendir bien en las fases finales. Esta vez lo tiene todo, seriedad atrás y una pléyade de futbolistas fantasiosos y desequilibrantes arriba. Van Persie, Kuyt y, sobre todo, Robben deberán moverse al ritmo que marque uno de los jugadores más desequilibrantes del mundo cuando está en forma: Wesley Snejder.
INGLATERRA: Se presentan con un equipazo y las ideas muy claras. Capello sabe como exprimir el jugo a sus futbolistas y su medio campo es temible. Sufrirán en la retaguardia pero llegarán lejos. Cierto es que dependen mucho del estado de salud de esa bestia llamada Rooney, un futbolista estratosférico que deberá confirmar que encabeza el escalón de los perseguidores de Ronaldo y Messi.
SERBIA: En efecto, Serbia no está llamada a ser campeona del Mundo pero sí tiene pinta de ser una de las grandes animadoras. En todas las citas mundialistas hay una gran sorpresa y esta Serbia de Antic tiene muy pinta. Un equipo lleno de seriedad y talento que lleva trabajando con mucha calidad desde que el sabio Radomir se hizo cargo del banquillo.

1 comentarios:

Sergio dijo...

No creía yo en la Alemania de Joaquim Low hasta que he visto el partido contra Australia. Muevan el balón de una manera espectacular, realizan unas triangulaciones propias de la Selección española en sus mejores momentos y, completamente de acuerdo con lo que tu dices, hay selección germana para rato puesto que muestran buenas maneras los llamados a sustituir a los Klose y compañia. Alemania a dado frente a Australia -a mi entender y no solo por el resultado- un golpe encima de la mesa.
Un saludo!